Leemos estupefactos el artículo publicado el domingo 18 de Mayo en la edición digital de El País titulado: “Las bicicletas erosionan Abantos”.
La autora del texto atribuye la erosion que se produce en las laderas del monte Abantos, en San Lorenzo del Escorial al uso de “bicicletas más pesadas y ruedas con mayor grosor”.
Curioso es que en el artículo no figura ninguna imagen de esta supuesta degradación de los caminos.
Según la Wikipedia: “La erosión es la degradación y el transporte del suelo o roca que producen distintos procesos en la superficie de la Tierra”
Los tipos de erosión son:
- Hídrica: Producida por el arrastre del agua
- Eólica: Por la fuerza del viento
- Gravitacional: Por la gravedad de las laderas
Como factor humano menciona unicamente la agricultura.
Entonces ¿Es comparable el efecto de una explotación agrícola al paso de bicicletas? Por muy gordas que tengan las ruedas ¬¬’
¿No es además el ciclismo de montaña un deporte que ha permitido la señalización de sendas para uso y disfrute no solo de ciclistas, sino también de senderistas y viajeros?
¿No ha ayudado al conocimiento y respeto del monte por parte de un sector de la población que vive en las ciudades y que de otro modo apenas sale de estas?
¿Crees realmente que los ciclistas de montaña degradamos el monte? Deja tu comentario!
De paso, os recordamos las 8 reglas del camino, elaboradas por la IMBA (International Mountain Bike Association).
2 Comentarios
Pues si, de nuevo voy a contracorriente. No he leído el artículo que se cita porque creo menos en un periodista que en un cura. Pero aunque se que somos muchos biciclistas los que andamos con sentido común y respeto por la naturaleza soy también consciente y lo he visto tanto el resultado como en acción, que hay bastantes descerebrados (por ser fino con ellos) que efectivamente degradan considerablemente el terreno que pisan a modo de modernos Atilas de las dos ruedas.
Seguro que la autora del artículo tiene un todo terreno